Este 25 de noviembre encontró a Artistas Pergaminenses Unidas (APU) irrumpiendo el espacio público para denunciar un tipo de violencia que se ejerce sobre las mujeres y la población en general: la contaminación de los cuerpos como consecuencia de la contaminación ambiental.
“Es una problemática que queríamos abordar hace rato. No podemos pasarla por alto porque, lo hagamos consciente o no, nos atraviesa como cuerpos y sujetos en todo momento: cada vez que tomamos agua de la canilla, cuando nos bañamos, cuando estamos eligiendo en la verdulería, mientras amamantamos, cuando visitamos a un médico/a”, expresaron.
De esta manera, el colectivo decidió poner foco en lo local y territorial para denunciar el atropello del agronegocio, mediante una performance que se llevó a cabo en el Arroyo Pergamino, donde recorrieron el paseo ribereño, desde Avenida Colón hasta Avenida Rocha, con máscaras plásticas que cubrían todo su rostro. “Mientras el país entero se encerró en sus casas y se puso barbijo para preservar la salud ante la pandemia global, el agronegocio continúa regando los territorios con agrotóxicos que incorporamos a nuestro cuerpo al tomar agua, al comer alimentos y al respirar el aire”, manifestaron.
Luego de que los resultados de los análisis del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Balcarce y la Corte Suprema de Justicia arrojaron la presencia de 18 agroquímicos diferentes en el agua de Pergamino, se ordenó un límite restrictivo y de exclusión para las fumigaciones áreas y terrestres con plaguicidas en la localidad.
“Este logro es producto de la lucha de mujeres pergaminenses que salieron a denunciar un modelo agroalimentario ya insostenible, que genera ganancias para unos pocos en perjuicio de la salud de todos; mujeres que tuvieron que salir de sus barrios olvidados para enfrentarse con los productores rurales de la elite pergaminense; madres movilizadas por un motivo que a cualquier persona movilizaría: la salud de sus hijas/os. Mujeres que resisten junto a sus familias, en Villa Alicia o Santa Julia, ante un sistema que germina enfermedad”, indicaron.
De esta manera, APU denuncia que violencia contra las mujeres es también “limitarnos el derecho a la salud, el acceso a la calidad de vida, a agua potable, a un ambiente sano”.
Foto de tapa: Colectivo A.P.U.
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