Se reunieron los representantes gremiales de los docentes, miembros del Consejo Escolar, el jefe distrital, inspectores de distintas áreas y niveles educativos y un arquitecto, ya que el único tema de la reunión de la Unidad Educativa de Gestión Distrital (UEGD), que se concretó el viernes, fue la infraestructura escolar.
Se puntualizó respecto a la particular situación provocada por la ola de calor y la insuficiente cantidad o falta de mantenimiento de ventiladores en los establecimientos educativos, con la presencia de los consejeros escolares Guillermo Murray, Gonzalo Aguerre y la presidente del Consejo Escolar, Analía Capriotti. Precisamente éstos dos últimos se retiraron a poco de iniciada la reunión y antes de que se abordara el tema del uso de los fondos públicos enviados por Provincia de Buenos Aires y Nación, durante enero y febrero.
“Lamentamos que en el ámbito de diálogo y consenso que debe ser la UEGD, ambos representantes públicos hayan tenido una actitud tan poco digna del rol que ocupan, así como irrespetuosa hacia el resto de los representantes de la comunidad educativa”, lamentó la titular del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA), María Luisa Mazzola.
“Consideramos que no son los gritos y los portazos la forma en que se deben explicar e informar las razones por las que no se avienen al consenso y a fundamentar e informar sin omisiones los montos y destinos de la inversión en infraestructura para nuestras escuelas”, siguió. Y pidió: “Esperamos que Aguerre y Capriotti recapaciten, moderen sus actitudes violentas y cumplan con su importante función más allá de su pertenencia y objetivos político partidarios”.
Además, Mazzola criticó la falta de prioridad que demostraron ambos consejeros escolares ante la ola de calor ya que destinaron dinero a la compra de calefactores y no de ventiladores como debería darse de acuerdo a las necesidades más inmediatas de los establecimientos educativas actualmente.
Asimismo, en la reunión, según consta en acta, se abordó el tema de la Escuela de Educación Estética -institución especializada en artes- como también del Conservatorio de Música que no poseen edificios propios, por lo cual ocuparían la exsede de la Escuela Municipal de Bellas Artes, de calle San Martín casi Peatonal, pero el Municipio aún no entregó las llaves para que puedan funcionar en ese sitio, por lo que se efectuó un pronto despacho para que puedan ser otorgadas de inmediato.
Portazos y “papeles arrugados”
También se abordaron las problemáticas planteadas por el Centro de Formación e Inclusión (CFI), que funciona en el predio de la Escuela N° 502- Escuela Primarias N° 44, 19 y 42; Secundarias N° 15, 14 y 4 y Jardín de Infantes N° 918. Cada comunidad educativa viene planteando hace meses reclamos por la falta de condiciones en las aulas y en los espacios comunes como falta de ventiladores y refrigeradores de aire o y ausencia del suministro de agua, entre otras demandas esenciales.
Según detalla el acta redactada durante la reunión, la titular del Consejo Escolar manifestó que existen situaciones que se resuelven año a año y que “aún así en la Escuela Secundaria N°19 se han detectado 70 vidrios rotos”, mientras que el consejero Aguerre atribuyó esta circunstancia a “daños de manera deliberada”, lo cual produjo el enojo de las representantes gremiales e inspectores, quienes dejaron en claro que “la actividad pedagógica no debería ser causante de problemas de infraestructura”.
Luego, Capriotti y Aguerre, tras presentar los informes sobre las “Previsiones 2023”, donde constan los presuntos destinos presupuestarios, decidieron abandonar la reunión, dejando como único representante al consejero Guillermo Murray. Esos informes fueron criticados por los sindicatos por no tener firmas, ni fecha, como tampoco sellos o membrete ni ningún otro elemento que le otorgue legalidad.
“Haciendo un pase de comedia mal actuada, Capriotti arrojó violentamente sobre la mesa y frente a inspectores, arquitectos de la Provincia y representantes gremiales docentes y estatales y el mismísimo inspector jefe distrital, Gustavo Bevacqua, unos papeles garabateados en dos hojas A4 sin sello, sin firmas, mal diseñadas, sin explicaciones sobre cómo fueron designadas las prioridades de las obras escolares en las que van a utilizar los dineros que en gran cantidad envía la provincia para tal fin; dos páginas arrugadas que cualquiera pudo haber hecho, carentes de valor, no socializadas previamente, ni discutidas ni consensuadas por la UEGD”, reveló Mazzola.
En tanto, la titular de SUTEBA calificó como una falta de respeto y una puesta en escena la actitud de los consejeros escolares Capriotti y Aguerre: “Fue patético e infantil irse ‘ofendidos’ apenas iniciada la reunión” porque “se les pedía explicaciones respecto al uso de fondos públicos, de por qué no terminan de resolver nunca en forma completa los problemas de infraestructura escolar, de por qué no realizan la pertinente gestión para que el intendente (Javier Martínez), al cual responden, use los dineros del Fondo de Financiamiento Educativo en lo por ley corresponde. Es decir, en arreglar y equipar escuelas”.
Murray fue quien quedó a partir de ese momento a disposición en la reunión para brindar la información de la que disponía tras la sorpresiva retirada de Gonzalo Aguerre y Analía Capriotti.
El consejero presente aclaró que debe tenerse en cuenta que el presupuesto debe ser distribuido entre las 134 escuelas de la ciudad y además, según su versión, esos fondos fueron recibidos con fecha 7 de febrero pasado y no durante enero, como se suponía.
Tras varias inquietudes y necesidades planteadas por inspectores y representantes gremiales, surgió la duda por si con la ejecución del Fondo Educativo no puede saldarse la demora en los tiempos del sistema de rendición de fondos, a lo que Murray respondió enfáticamente que “hasta el momento no se ha podido contar con la voluntad del Municipio”.
Gustavo Bevacqua, en tanto, reclamó la construcción de una base de datos común y un plan de seguimiento “dado que la falta de organización atenta contra la gestión”. Y la inspectora de Educación Secundaria, Lucrecia Maldonado, solicitó que se trate la situación de la provisión de agua que afecta a varios establecimientos, como la Secundaria N° 4 y 14, que no cuentan con ese servicio.
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