El hecho tuvo lugar el 17 de febrero de 2023, cuando el joven intentó evadir un control y fue seguido por inspectores municipales.
Según la causa, la persecución fue irregular e ilegal, ya que se realizó a gran velocidad, en contramano y sin órdenes institucionales que la respaldaran. Además, la escena del siniestro no fue preservada, lo que generó sospechas adicionales sobre el proceder de los funcionarios.
En la justicia penal, tres agentes municipales enfrentarán juicio por incumplimiento de deberes de funcionario público.
El abogado de la familia sostuvo que “el Estado debe responder por los daños generados por el accionar irregular de sus agentes” y cuestionó la ausencia de protocolos claros sobre cómo deben actuarse en persecuciones vehiculares.
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