En el marco de un procedimiento policial, un grupo de efectivos detuvieron por una presunta infracción a Cristina Servino, quien había llegado hasta las calles Barbazán y Avenida Almafuerte para presentar la documentación de la motocicleta de su hijo, que estaba demorado en el lugar.
De acuerdo a la Agencia de Noticias Andar, la mujer, de 59 años, fue esposada a la espalda y tirada al suelo y en ese estado de indefensión comenzó a recibir patadas. Uno de esos golpes le provocó el desplazamiento de una vértebra que le impide caminar.
Para justificar su accionar, la Policía le inició una causa por Atentado contra la Autoridad, pero la familia radicó la denuncia penal e interviene la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), en calidad de Mecanismo Local de Prevención de la Tortura.
“Voy a cumplir 60 años ahora ¿Me voy a quedar el resto de mi vida en una silla de ruedas?”, dijo Cristina Servino en un video que publicó en las redes sociales, horas después de ser golpeada por efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, que prestarían servicio en la Comisaría Tercera.
El pasado 24 de julio, cerca del mediodía, Jorge, el hijo de Cristina, salió de la casa familiar hacia su domicilio ubicado en la zona rural de Pergamino. A las pocas cuadras, a la altura de las calles Barbazán y Avenida Almafuerte, se cruzó con tres agentes motorizados que venían transitando en dirección contraria y que lo obligaron a detener el vehículo, supuestamente porque transitaba sin casco.
Enterada de la situación, la mujer fue hasta el lugar en su automóvil, llevó el casco y los papeles de la moto, aunque los policías los mantuvieron demorado en la vía pública sin explicarles los motivos. Ante esa situación, Jorge se fue corriendo en dirección a la casa familiar y para ese entonces ya habían llegado dos patrulleros y más efectivos.
Mientras la mujer continuó hablando con los y las funcionarias policiales en el procedimiento, otros a bordo de motocicletas fueron a buscar su hijo. En la entrada de la vivienda, amenazaron y empujaron al marido de Cristina Servino. Y cuando estuvieron adentro recorrieron todas las habitaciones y le apuntaron con un arma al nieto de la familia, de 13 años, según la denuncia. Jorge no estaba.
El grupo de oficiales volvió al lugar donde se inició el procedimiento policial y comenzaron a agredir verbalmente a Cristina: “Rómpele todo el auto”, ordenó uno de los policías y otro se subió encima del capot para impedir que la mujer arrancara el vehículo.
En ese momento, una oficial sacó a la víctima del interior del auto tironeándola de los pelos y la arrojó al suelo. En el piso, la esposó a la espalda y en ese estado de comenzaron a pegarle patadas principalmente en la espalda, brazos y piernas. Luego de los golpes, la subieron a un patrullero y la trasladaron a la Comisaría Tercera.
Cuando la familia de Servino llegó a la Comisaría, ella seguía arriba del patrullero. No podían bajarla por los dolores que presentaba producto de los golpes recibidos. La médica de Policía sólo se encargó de preguntarle cómo estaba pero no la revisó ni constató las heridas. Ante la imposibilidad de moverse por sí misma, personal del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) llegó a la dependencia policial para trasladar a la mujer al Hospital Interzonal General de Agudos “San José”.
La familia salió detrás de la ambulancia pero, por protocolo COVID-19, no pudieron ingresar con Cristina.
Algunas horas después, una oficial les dijo que la iban a sacar por otra puerta y que vayan directamente a la Tercera. En la dependencia, le informan que sería trasladada a la Comisaría Segunda, que aloja mujeres, donde debía quedar detenida hasta la indagatoria con el fiscal.
Sin embargo, al constatar que no podía caminar, el personal de la Segunda determinó que no podía ser alojada y notificó de la situación a la Fiscalía, desde donde dispusieron la libertad de la mujer con el compromiso de presentarse posteriormente a la declaración indagatoria.
Los golpes sufridos le provocaron el desplazamiento de una vértebra que, aún hoy, le impide caminar. También tiene que enfrentar un proceso judicial por Atentado contra la Autoridad.
Según la versión policial, la mujer intentó atropellarlos. Al mismo tiempo, la familia de Cristina Servino presentó la denuncia penal por Abuso y Violencia Policial ante la Fiscalía Nº 7 del Departamento Judicial Pergamino, a cargo de Alejandra María Ghiotti.
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