El Concejo Deliberante podría vivir desde mediados del próximo mes un serie de cambios en la integración y el número de los bloques. Eso se debe a que el 9 de julio vence el plazo para la inscripción de las alianzas que participarán en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre, en las que solamente se votará por legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares. A su vez, el 19 de julio es la fecha límite para la presentación de las listas de candidatos.
Todo esto podría llevar a un reagrupamiento de las bancadas. Un ejemplo: a nivel provincial se habla de la posibilidad de una alianza entre La Libertad Avanza y el sector del Pro que encabezan los diputados Cristian Ritondo y Diego Santilli. En Chacabuco, ese espacio está representado por el concejal Ignacio Orsini. Por ende, si el acuerdo se concreta, es posible que a partir del mes próximo Orsini deje la bancada de Juntos, en la que se encuentra actualmente, y se integre en un nuevo bloque con la edil de La Libertad Avanza, Claudia Sosa.
A su vez, el bloque del Pro Chacabuco está integrado por concejales que forman parte del sector del senador provincial Marcelo Daletto, quien ya se expresó en contra de la estrategia de Ritondo y Santilli y a favor de conformar un “frente de centro” con sectores radicales y del peronismo. Si esa alianza se da a nivel provincial, los ediles del bloque Pro -Alejandro Cieri, Jorgelina Soñez y Agustín Zarkovich- podrían reunirse con los concejales radicales, que actualmente forman parte de Juntos. Curiosamente, allá por diciembre de 2023 los tres representantes del Pro Chacabuco habían sido expulsados de esa bancada pues se consideró que habían facilitado que Tomás Domínguez, de Unión por la Patria, asumiera la presidencia del Concejo.
El vencimiento del plazo para la presentación de alianzas y candidatos también podría tener consecuencias para el bloque oficialista del cuerpo deliberativo local en caso de que se confirme una ruptura entre los sectores de Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa con el del gobernador Áxel Kicillof. Si ocurre eso, podría quedar una bancada integrada por Domínguez, Sofía Silva, Laura Mansilla, Santiago Carnaghi y Karina Geloso, en representación del kirchnerismo-massismo, y otra conformada por los kicillofistas Julieta Garello, Marcos Peralta y Fernando Lescano.
Una ruptura del bloque de Unión por la Patria le complicaría al gobierno de Darío Golía la relativa fuerza que consiguió en este año y medio en el Concejo Deliberante pese a no tener mayoría propia. Esa no sería la única complicación: también es de esperar que, en medio del proceso electoral, la edil Sosa, que en este tiempo tuvo una posición dialoguista con el oficialismo -al cual acompañó con el voto en varios temas-, se vuelque más decididamente a la oposición, sobre todo compartiendo bancada con Orsini.
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