Dormir bien es una necesidad fundamental para mantener el cuerpo y la mente en equilibrio. El descanso nocturno influye directamente en nuestra salud física, emocional y mental: mejora la memoria, fortalece el sistema inmunológico, regula el estado de ánimo y contribuye a un buen funcionamiento del metabolismo.
La manzanilla no solo es una bebida reconfortante, sino también una aliada natural del sueño. Su compuesto activo más importante, la apigenina, actúa sobre los receptores benzodiacepínicos del cerebro. Al hacerlo, promueve un leve efecto sedante.
Además, posee propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas, lo que ayuda a calmar el sistema digestivo, ya que un estómago alterado puede dificultar el sueño muchas veces. Su efecto suave la hace ideal para todas las edades.
La raíz de valeriana contiene varios compuestos bioactivos, entre ellos el ácido valerénico y los valepotriatos, que aumentan la disponibilidad de GABA, un neurotransmisor que reduce la actividad del sistema nervioso central. Al disminuir la excitación neuronal, la mente se desacelera y se prepara para el descanso.
Es especialmente efectiva para personas que sufren insomnio relacionado con ansiedad, pensamientos o estrés emocional. Además, muchos estudios demostraron que puede mejorar la calidad del sueño, no solo ayudar a conciliarlo.
Siendo el más conocido de esta lista, el tilo (o linden) contiene flavonoides y aceites esenciales que actúan como sedantes naturales. Tiene un efecto relajante sobre el sistema nervioso autónomo, responsable de regular funciones como el ritmo cardíaco o la presión arterial. Al calmar esta parte del organismo, el cuerpo entra en un estado de descanso más fácilmente.
También es útil en casos de palpitaciones nerviosas, tensión muscular o sensación de opresión en el pecho provocada por estrés.
La lavanda, tanto en aceite esencial como en infusión, contiene linalol y acetato de linalilo, compuestos con efectos ansiolíticos y sedantes demostrados. Ayudan a reducir la actividad del sistema nervioso simpático (responsable del estado de alerta) y favorecen el dominio del parasimpático, que induce relajación y sueño.
Además, mejora el estado de ánimo, reduce la irritabilidad y puede calmar dolores de cabeza tensionales.
La melisa actúa sobre los mismos mecanismos que la valeriana, pero con un efecto más suave. Favorece la liberación de GABA y modula la actividad del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal, que regula las respuestas al estrés.
De esta forma, ayuda a bajar los niveles de cortisol (la hormona del estrés), facilita la digestión y promueve una sensación de tranquilidad general. Es ideal para personas que experimentan dificultad para “apagar la mente” antes de dormir.
Esta planta es rica en citral, un compuesto con efecto sedante suave que también actúa como relajante del sistema digestivo. Muchas personas no pueden dormir bien por molestias gastrointestinales o hinchazón, y la hierba luisa ayuda a prevenir esto.
Además, su aroma cítrico tiene un efecto relajante sobre el sistema nervioso y puede generar una sensación placentera que favorece el sueño.
Si todavía no recibís las noticias de PRIMERA PLANA en tu celular, hacé click en el siguiente enlace https://bit.ly/3ndYMzJ y pasarás a formar parte de nuestra base de datos para estar informado con todo lo que pasa en la ciudad y la región.