Al descubrir la mochila, Bartolucci, con más de dos décadas de experiencia como conductor, comenzó a revisar su contenido en busca de información que lo ayudara a identificar a la dueña. Fue así como, a través de un comprobante de cajero automático, halló el nombre de la pasajera.
“La señora estaba desconsolada al darse cuenta de que había perdido el dinero cuando se sentó a cenar en un restaurante del puerto”, relató el taxista.
Gracias a su memoria de la conversación mantenida durante el viaje, recordó el nombre del hotel donde la mujer se hospedaba y, con ayuda del personal del establecimiento, logró contactarla.
Siguiendo el protocolo recomendado por Servitaxi, la empresa a la que está afiliado, Bartolucci dejó la mochila en la sede de la compañía para que fuera retirada allí por su propietaria. “Era la primera vez que alguien olvidaba una suma tan importante, por eso tomé todos los recaudos”, explicó.
La turista, profundamente agradecida, destacó la honestidad del conductor: “Gracias a su integridad y valores, pude seguir disfrutando de mis vacaciones”.
El gesto de Raúl fue celebrado por muchos, pero él lo resumió con humildad: “Las felicitaciones son lindas, pero la mayor satisfacción es haber hecho lo correcto”.
Si todavía no recibís las noticias de PRIMERA PLANA en tu celular, hacé click en el siguiente enlace https://bit.ly/3ndYMzJ y pasarás a formar parte de nuestra base de datos para estar informado con todo lo que pasa en la ciudad y la región.