Los perros y gatos son considerados los animales que más compañía le hacen a los humanos por todo el cariño que brindan. Por eso es importante cuidarlos y hacerles los controles médicos correspondientes. En este sentido, una castración a tiempo es fundamental para las mascotas.
El proceso de esterilización, que puede ser considerado como una operación, incluye una serie de pasos previos que se deben tener en cuenta para que el resultado sea exitoso y no perjudique a la salud del animal. Ahora bien, ¿por qué tantos profesionales de la salud hacen hincapié en esto?
La esterilización, además de evitar la cría innecesaria y reducir el número de animales no deseados que luego son abandonados, reduce el riesgo de ciertos tipos de enfermedades cómo cáncer de mama, de ovario y útero además de infecciones del útero en la hembra. En el caso de los machos, pasa exactamente lo mismo.
En el caso de los perros, la mejor edad es entre los cinco y los seis meses, tanto para los machos como para las hembras. A su vez, otros profesionales consideran que es más beneficioso hacer este procedimiento a una edad más temprana llegada a las ocho semanas de vida. Pero de todos modos, depende del estado del animal.
En el caso de los gatos se considera que la mejor edad para esterilizar a un macho es entre los cinco y los siete meses de vida. En el caso de la hembra, un poco después, aunque ello dependerá de la época del año y de las preferencias del veterinario. En muchos países se esterilizan a partir de los 3 meses de edad.
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