La historia del automovilismo narró históricas hazañas donde hombres y máquinas vencían a las posibilidades. En nuestro país el Turismo de Carretera fue gran responsable de que ese mito convirtiera a la actividad en popular y masiva, donde los binomios eran los protagonistas desde la década del ‘30.
El tiempo pasó, las competencias cambiaron y en 2006 con la muerte en Rafaela de Alberto Noya y su acompañante Gabriel Miller, en el TC Pista, las autoridades empezaron a pensar en terminar con los acompañantes, decisión que se aceleró en abril de 2007, cuando perdió la vida en TC el nuevejuliense, Guillermo Castellanos.
Sin dar más explicaciones que las vinculadas a la seguridad y midiendo con la misma vara a la máxima especialidad y a un zonal, de los acompañantes sólo quedó el recuerdo que cada 29 de octubre se celebra el Día del Acompañante. Es en conmemoración a la muerte de Daniel Urrutia, quien viajaba junto a Juan Manuel Fangio, en la recordada carrera Buenos Aires-Caracas, de 1948.
La actividad zonal no tuvo opción más que acatar la medida y desde hace 13 años la polémica en torno al tema es candente y dividida. Ahora, una pergaminense amante de los fierros y actualmente presidente del TC 4000 Bonaerense, intenta seriamente que vuelvan las butacas derechas al automovilismo.
Febea Rost conoce el ambiente, es parte del automovilismo desde hace años y supo ser acompañante en reiteradas oportunidades. Ahora, junto a Fernando Paganucci, de Arrecifes y un pequeño grupo de entusiastas, presentaron un reclamo formal a la Comisión Directiva Automovilística (CDA).
“Año tras año tenemos más crisis, más costos, menos aportes y encima la pandemia, nuestro automovilismo zonal está muy mal y creemos que la vuelta de los acompañantes puede atemperar esa situación”, dijo la dirigente, quien es consciente que “este es un deporte de riesgo y todos los que estamos en el ambiente sabemos a lo que nos exponemos”.
El 8 de mayo de 2007 la Asociación de Corredores del Turismo Carretera (ACTC) sentenció que bajaba a los acompañantes. Lo hizo Oscar Aventín, secundado en el anuncio por el responsable médico, Rodolfo Balinotti; el jefe del Departamento de Desarrollo, ingeniero Alejandro Solga, y los pilotos José Luis y Marcos Di Palma, Gabriel Ponce de León, Norberto Fontana, Omar Martínez, Juan Manuel Silva, Lionel Ugalde, Emanuel Moriatis, Guillermo Ortelli, José Ciantini, Rafael Verna, Ernesto Bessone, Rubén Salerno y Sergio Guarnaccia, terminando con una tradición de 70 años.
Rost asegura que faltó fundamentación concreta para bajar a los acompañantes en el ámbito zonal porque aquí los circuitos son más pequeños, las velocidades son mucho más bajas y las medidas de seguridad son muy buenas. Y reafirmó que estadísticamente no hay motivos para que la decisión no pueda revertirse.
Es tal la repercusión de la idea que el documento lleva más de 1.200 firmas de personas interesadas a lo largo y a lo ancho de todo el país e hizo tanto ruido que el propio Juan María Traverso, hoy presidente de la Asociación Argentina de Volantes (AAV), debió salir a exponer que él no estaba de acuerdo con la vuelta de los acompañantes.
El desafío por delante será durísimo sobre todo porque desde siempre las estructuras del automovilismo argentino se caracterizaron por tomar decisiones de arriba hacia abajo y no al revés.
Conocedora de esa situación, Febea Rost le confirmó a PRIMERA PLANA que fueron contactados por Marcos Di Palma y Daniel Scioli, quienes tendrían intenciones de apoyarla políticamente, pero desistieron de esa opción.
“Febea Rost quiere un automovilismo genuino y transparente (...) y les voy a dar una primicia estamos viendo la posibilidad de armar una Asociación de Corredores de Automovilismo Zonal, para funcionar a nivel institucional independiente como lo hizo la ACTC en su momento”, aseguró.
Si todavía no recibís las noticias de PRIMERA PLANA en tu celular, hacé click en el siguiente enlace https://bit.ly/3ndYMzJ y pasarás a formar parte de nuestra base de datos para estar informado con todo lo que pasa en la ciudad y la región.
